viernes, 30 de septiembre de 2016

MASCARA DE PAPEL

Cuántas veces el ego se come a las personas, y cuantos egos viste caer sin poder cumplir sus promesas...?. Muchas veces sientes la impotencia de no poder poner tu corazón ante tanto grito egocéntrico, será el ego el orgulloso más carismático o será un simple farsante que queda expuesto ante cualquier alma simple y sin disfraz.
El ego casi nunca responde, solo pregunta y señala, y si se digna a responder lo hace vomitando cada palabra como si lanzara dardos a un círculo de Kermés queriendo conectar en el corazón y así ganar por muchos puntos.
Cuánto cotillón que se encarece con el paso del tiempo, cuando tu corazón se muestra transparente y decide que la fiesta terminó, que ya no necesita disfrazarse para hacer su mejor baile o actuar su mejor escena, porque al fin y al cabo uno no impresiona maquillado, uno lo hace cuando ya no le queda nada más que su cara lavada para mostrar.